sábado, 2 de mayo de 2009

Eyaculación Precoz

La eyaculación precoz es una falta de control sobre el reflejo eyaculatorio; por tanto, es un trastorno de la fase del orgasmo durante la relación sexual. La gran mayoría de los hombres experimentaron una eyaculación precoz en algún punto de su vida sexual. Es el problema sexual más frecuente en hombres, afectando al 25 a 40% de ellos. En los casos más graves, el hombre eyacula antes de la penetración de su pareja o segundos después de hacerlo.

Factores Psicológicos y Ambientales

Ciertos factores no físicos comúnmente contribuyen a un eyaculación precoz. Aún cuando los hombres ocasionalmente subestiman la relación que existe entre su bienestar emocional y un acto sexual satisfactorio, la eyaculación precoz puede ser causada, temporalmente, por depresión, estrés relacionado con asuntos económicos, expectativas poco realistas sobre su capacidad sexual, una historia clínica de represión sexual o una falta generalizada de auto-confianza. Las dinámicas interpersonales y de grupos contribuyen a mejoras en la función sexual, de modo que la eyaculación precoz puede ser causada por una falla de comunicación entre las parejas y sus círculos sociales, por heridas emocionales o por conflictos no resueltos que interfieran con la habilidad de lograr una intimidad emocional. La eyaculación prematura neurológica puede también conllevar a otras formas de disfunción sexual, o bien, intensificar el problema subyacente, especialmente al crear ansiedad y zozobra relacionada con su rendimiento sexual.

En otro contexto menos patológico, la eyaculación precoz puede deberse simplemente a un estado de extremo deseo y excitación sexual.

Algunas de las más recientes investigaciones se han enfocado en el papel que puede jugar la pareja femenina. Un estudio de parejas recién casadas reportó que el IELT del marido parecía verse afectado por las fases del ciclo menstrual de su cónyuge, siendo de menor duración durante la fase de fertilidad (ovulación). Otros estudios sugieren que los hombres jóvenes con parejas femeninas mayores en edad, llegan al umbral eyaculatorio con más rapidez promedio que aquellos con parejas de la misma edad o más jóvenes.


Tratamiento

Dependiendo de su severidad, la eyaculación precoz puede ser reducida considerablemente. Los tratamientos para los casos más leves se enfocan en gradualmente entrenar al paciente, mejorando su condicionamiento mental al sexo y el control de su estímulo erótico. En casos clínicos, se han presentado fármacos que retardan o eliminan la disfunción sexual. En contados casos se apela a la cirugía (neurotomía selectiva).

ACNE INFANTIL

Es un acné facial que principalmente afecta a
varones desde los 3 meses a los 24 meses, e incluso puede durar hasta los 5 años. Predominan los comedones y las pápulo-pústulas, pero pueden verse nódulos y cicatrices. Excepcionalmente, se ha asociado con tumores virilizantes o hiperplasia adrenal. La causa no es bien conocida.

El acné infantil se cree una entidad relacionada a los andrógenos que consecuentemente aumentan la actividad de la glándula sebácea, pero no necesariamente un signo de exceso de andrógenos basales. Usualmente, hay resolución del acné infantil durante los primeros seis y 12 meses de vida. El problema con el acné infantil es que es mucho mas persistente que el neonatal y puede causar cicatrices. En cambio, el acné neonatal tiene tendencia a resolver espontáneamente sin tratamiento.

Tratamiento tópico es la base de esta enfermedad cuando no se resuelve de manera espontánea. Puede utilizarse tretinoina tópica en concentraciones bajas. El único antibiótico sistémico utilizado en estos pacientes es la eritromicina, indicada para las pápulas o pústulas con tendencia a la cicatrización. Las tetraciclinas están contraindicadas por su tinción permanente en la dentadura. Es importante no tratar de quitar las lesiones mecánicamente con cualquier objeto. Consulte con su médico especialista y no automedique a sus niños.

Hiperplasia Prostática Benigna

A medida que pasan los años, la próstata puede aumentar de tamaño y bloquear la uretra o la vejiga, pudiendo causar dificultad para orinar o interferir con las funciones sexuales. Aunque este trastorno no es un cáncer, generalmente habrá que someterse a una cirugía para corregirlo. Los síntomas de esta enfermedad o de otros problemas en la próstata pueden ser similares a los del cáncer.

El hombre debe fijarse en los siguientes síntomas y recurrir a un médico: flujo débil o interrumpido de la orina, orinar frecuente (especialmente en la noche), dificultad al orinar, dolor o ardor al orinar, sangre en la orina y dolor constante en la espalda, caderas o pelvis. A menudo, el cáncer prematuro de la próstata no presenta ningún síntoma.

La probabilidad de recuperación y la elección del tratamiento dependen de la etapa de avance del cáncer.

Varias pruebas ayudarán al urólogo a identificar el problema y a decidir la mejor opción de tratamiento. Las pruebas cambian de paciente a paciente, pero las que exponemos a continuación son las más comunes.

Aparte de una historia clínica que le pregunte por sus antecedentes familiares y las enfermedades más significativas que usted ha padecido, se le hará una serie de preguntas relacionadas con la sintomatología prostática. No olvide que el crecimiento de la próstata produce un estrechamiento de la uretra y, por tanto, una dificultad al vaciamiento de la orina de la vejiga. Esto va a causar una serie de síntomas tanto obstructivos como irritativos como hemos comentado.